Los Palacios Nazaríes constituyen la parte más popular del complejo monumental de la Alhambra. Los mismos se dividen en varias partes: el Palacio de Comares, el Palacio de los Leones, el mexuar y las llamadas habitaciones del emperador.
Durante su apogeo, en época nazarí, los Palacios fueron el centro político y cultural del Reino de Granada. Mientras que algunas estancias estaban reservadas a la vida privada del sultán y su corte, otras como el Salón de Embajadores en el Palacio de Comares estaban dedicadas a actos políticos o públicos.
A lo largo de los años, los Palacios Nazaríes han sido testigos de numerosos acontecimientos históricos y han sido objeto de admiración por su belleza y sofisticación arquitectónica. Han sufrido importantes remodelaciones y con la conquista cristiana y la construcción del Palacio de Carlos V su estructura se modificó considerablemente.
La arquitectura de los Palacios Nazaríes impresiona a aquellas personas que los visitan. Como han señalado diversos expertos, su estructura es una sorpresa continua, pasando de espacios de pequeño tamaño como el mexuar a grandes patios como el del Palacio de Comares.
Las decoraciones de taraceas, el tratamiento del yeso, las columnas de mármol o el uso de los mocárabes hacen de los palacios de la Alhambra uno de los rincones de mayor valor y belleza. Llama la atención el uso de decoraciones epigráficas, combinando versos del Corán con otros elementos decorativos. Además, se usan coloridos azulejos y yeserías con formas florales o vegetales.
Si algo destaca de los Palacios Nazaríes son sus patios. Por encima de todos ellos destacan el Patio de los Arrayanes, en el Palacio de Comares, y el Patio de los Leones. El primero de ellos, el Patio de los Arrayanes, es famoso por su enorme alberca, rodeada de arrayanes. Su zona sur fue remodelada de forma considerable cuando se construyó el Palacio de Carlos V.
Por otro lado, el Patio de los Leones es sin lugar a dudas el espacio más fotografiado y conocido de los Palacios Nazaríes y de la Alhambra. En su centro se ubica la famosa e impresionante fuente de los leones y en torno a ella algunas de las salas más conocidas de la Alhambra: la sala de Mocárabes
De entre todas las estancias de los Palacios Nazaríes cabe hacer una mención de aquellas más relevantes por su importancia histórica o estética:
1. Sala de los Abencerrajes: Esta sala debe su nombre a una antigua leyenda que cuenta la trágica historia de los Abencerrajes, una de las familias nobles del Reino de Granada. La sala cuenta con una hermosa cúpula y detalles decorativos impresionantes.
2. Sala de los Reyes: Esta sala es conocida por su techo de madera tallada y pintada. En ella se representan escenas de la corte nazarí.
3. Sala de los Embajadores: Esta sala es la más grande del Palacio Nazarí y se utilizaba para celebrar recepciones y ceremonias importantes. Destaca por su impresionante cúpula y sus detalles en estuco.
Estas son solo algunas de las muchas salas y espacios que se pueden visitar en los Palacios Nazaríes. Cada uno de ellas cuenta con su propia historia lo que hace que la visita sea una experiencia inolvidable.
Si te estás planteando visitar la Alhambra junto a un guía experto debes de reservar con cierta antelación para poder conocer los Palacios Nazaríes. La entrada a los Palacios Nazaríes está muy demandada por ser la parte más popular de la Alhambra y la mejor forma de conseguirla y disfrutar de este rincón de Granada es a través de una visita guiada o audioguia .